28 de febrero de 2006

Para quienes no pudieron ver a U2.












Tratar de describir el concierto y lo que me provocó es algo que aún no soy capaz de hacer. La felicidad de verlos por segunda vez es igualmente indescriptible. Sorry son fan de U2, y también de la tecnología al servicio de la música y su espectáculo, y de lo que la música puede hacer en las personas, sobre todo cuando es tan bien interpretada, cuando escuchas canciones que después de 20 años son un himno que quizás cuantas generaciones más también amaran. Más o menos así se veían en escena y así el estadio lleno esperando, en la cancha un montón de cabezas una junta a la otra, superando con creces la escala de 4 por metro cuadrado, la galería y andes sin escalas, pues también estaban ocupadas y algunos de pacífico desde las 17 horas para asegurarse que su asiento numerado no fuera ocupado... Lindo, lindo cierre para un buen verano!