6 de noviembre de 2005

Yo sé bien

Sé bien que esta historia tiene un claro final. Más bien, no debería ser una historia que siempre estará ahí por los siglos de los siglos que permaecezca en la tierra. Sé por lo mismo que hay muchas cosas que no son ciertas. Pero lo que mejor sé es que en lo que a mí me toca, seguiré haciéndome la loca, porque el placer y lo gratificante que es saber que andas por ahí dando vueltas, esperando que aparezca (sabiendo que apareceré) y lo que has revitalizado estos muchos días, lo amerita.

Habana Blues

"Pero apúrese, mire que en perder el tiempo, este país es el mejor del mundo".
Aún no tengo claro por qué me gustó tanto Habana Blues (Benito Zambrano, el español de "Solas"). A todas luces es una enorme película, por todos esos elementos básicos-fundamentales: buen guión, buena fotografía, buenas interpretaciones, buena banda sonara, una tremenda historia -conocida en todo el mundo- y compleja de tratar si pienso en que fácil era caer en lanzar y lanzar panfletos sobre cómo viven (o no viven) los habitantes de esa atractiva isla. Conmueve, eso es lo que pasa. Sueñan y sueñan, pero saben a cada segundo, en cada rostro amado, quizás más que en ningun otro lugar, cúanto puede costar un sueño. Eso lo dice muy bien uno de los temas que suenan al final, cuando es imposible que no se te "inunden los ojos":
Arenas de Soledad