30 de diciembre de 2004

Sobre uno de esos juegos de antes

En ese juego que creo se llama "Cómo te ven" - por lo menos acá en Chile- y que trata de que los otros partiipantes digan qué animal serías, qué color serías y en fin.
Era común jugarlo en esa fase en que pasas de jugar en la calle a la "pinta", a "las escondidas", al "tombo" a preocuparte de cómo te ves, si estás perinada, si la ropa está bien y ruegas porque te dejen ir a la fiesta en que va a estar el eterno príncipe azul. Bueno, por esos años siempre me dijeron que soy azul o celeste y que sería o una pollita, un gatita o perrita (lo que detestaba!)p cualquier animal frágil.
Hace un par de años, viejota ya, jugamos con algunos amigos de la U. Curiosamente estaba una de mis hermnas. Para ella soy una leona. Claro, soy mayor y conoce mi lado "rudo" o "fiero" cuando de defender a los míos se trata. En cuanto a los colores, sigo siendo azul o celeste, lo que una estudiante de psicología dijo que significaba "amor en cualquiera de sus manifestaciones"". Estaba también mi mejor amigo, para el que, por cierto, soy celeste. Para él sigo siendo frágil: me describió como una polluelo recién nacida que necesita mucho cuidado, que está temerosa y que tiene ganas de volar. La mayoría del tiempo, me sigo sintiendo así.