12 de marzo de 2006

Unas amigas se ponían al día en temas del corazón. De historias muy diferentes pasaron a poder comparar frases y modos. En resumen, esto:

El cree haber hecho más mal del que hizo. Dice haber dicho siempre la verdad. Que sí la quiere. Que un tiempo más pueden ser amigos otra vez. También piensa que puede soportar más tiempo la vida que lleva. Que es lo suficientemente fuerte. Que fue ella quien dejó de comprender la diferencia. … Él cree que la honestidad del principio excusa lo que vino después.

Para ella, una, dos, tres dudas fueron más de lo que podía obviar, aun cuando podía un poquito más para burlar -de día- la soledad. Lo que minó el juego de compañía fueron las manos, los hombros, los abrazos negados. Dice que asume los rasguños y la pérdida de la ingenuidad que se levantaba casi como una bandera envidiaba por sus congéneres que llevan –sin querer- mucha más desconfianza de algunos hombres. Al final ella sabe que así como construyó rápido la ilusión que sabía no era más que eso, del mismo modo la puede deshacer, porque a fin de cuentas, siem
pre mantuvo un cable a tierra. Algo que no sabe si es bueno... Ella ya no quería comprender.

El único problema son las dudas que quedarán dando vueltas, por un tiempo corto, no dan para más.
Lo único que da risa, es que en el fondo, bien en el fondo toda ilusión quiere ser real. Aunque no dé.

Él y ella, en lo único en que están de acuerdo es que fue sin querer y en que siempre tuvo fin.
Fotos: instalación de mi amigo Pablo Fuentes, les debo el nombre.

Streets of love / Rollings Stone
You're awful bright, you're awful smart
I must admit you broke my heart
The awful truth is really sad
I must admit I was awful bad
While lovers laughed and music plays
I stumbled by and I hide my pain
The lamps are lit the moon is gone
I think I've crossed the Rubicon
Walked the streets of love
And they're full of tears
Walked the streets of love
And they are full of fears
While music pumps from passing cars
A couple watched me from a bar
A band just played the wedding march
and the cornerstore mends broken hearts
A woman asked me for a dance
It's free of charge just one more chance
Walked the streets of love
And they are full of tears
Walked the streets of love
For a thousand years
You had the moves, you had the cards
I must admit you were awful smart
The awful truth is awful sad
I must admit I was awful bad

18 Comments:

At lunes, marzo 13, 2006 2:36:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Que cierto es lo que dices Clementina sobre que simpre se quiere creer, ese es el problema cuando se conoce a alguien. Tambien las palabras que se dan y salen de algunas bocas sin que sean capaces de actuarlas.
Saludos a las amigas.
Tama

 
At lunes, marzo 13, 2006 4:10:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Lo sintetizaste tal cual. Imposible mejor dicho.
Cariños, tú amiga M.

 
At lunes, marzo 13, 2006 9:47:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

impresionante a cuantas nos pasa lo que relatas, me senti super identificada, como si fuera mi historia! jajajaja.
un beso amiga mia!
Ale
PD me gusto tu blog, aunque echo de menos tus clsicas pelas de cables, te da verguenza tonta lesa?? Dale nomas!
Ale

 
At martes, marzo 14, 2006 12:25:00 a. m., Blogger Juan Pablo Belair said...

Luminosa Clementina, que relato más oscuro para tu esencia. Me conmovió por completo, pero especialmente aquello de tener la certeza de la ilusión. Un beso "deadeveras".

 
At martes, marzo 14, 2006 3:59:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Yo no estoy de acuerdo con Juan Pablo, porque simplemente, la vida es así de vez en cuando, y a mi y a otras amigas nos tocó así... y puedes decir que nos hemos puesto duras, bueno, pues lamentablemente puede que sea así, también les puede pasar a los hombres. O no?
Saludos, Tama

 
At jueves, marzo 16, 2006 1:22:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Es un agrado darse cuenta que las diferencias de sentir y pensar siguen estando marcadas entre hombres y mujeres, eso es el encanto que tienen ellas y que tenemos nosotros, la búsqueda de un punto, ese mísero punto que nos haga entender a la otra persona, no equivocar perspectivas, si no que más bien abrazar de verdad, encajando hombros, cuello, cabezas y piernas, sin pensar en lo bueno y lo malo, pensar solo en lo que hay frente y darse cuenta que alo mejor uno no puede entender bien, sólo hacer sentir bien y sentirse feliz uno. Poco claro, poco comprensible, así creo que son las cosas de dos con amor y sin amor.

 
At jueves, marzo 16, 2006 1:27:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Sabes? me encanta la mirada que le das a las cosas, qué agrado es que me postees o cuando conversamos, des con el punto, nada mísero, bordeando el positivismo, pero más que nada, reparando en que hay cierta magia, incluso en esos desencuentros. Besis.

 
At viernes, marzo 17, 2006 2:57:00 p. m., Blogger Blood said...

La música es una vibración, la vida es uan suma de ellas en distintas frecuencias. Todos tenemos música en nuestras vidas, de hecho el flujo sanguíneo depende de un ritmo. Por tanto sangre y música van de la mano. Gracias por tu visita.

Saludos sangrientos

Blood

 
At viernes, marzo 17, 2006 3:17:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Y donde esta la respuesta de Juan Pablo, ah?
Tama

 
At miércoles, marzo 22, 2006 8:35:00 p. m., Blogger Coctelmarx said...

Yo estoy del lado del romano

 
At sábado, marzo 25, 2006 12:56:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

"La ciencia es basta, la vida es sutil, y para corregir esta distancia es que nos interesa la literatura."
Roland Barthes (1915-1980), crítico literario francés

 
At jueves, abril 06, 2006 10:47:00 p. m., Blogger Juan Pablo Belair said...

Y como ya hace casi 50 años que se descubrió la relatividad del tiempo le respondo a Tama.
No entiendo cuál es el desacuerdo (y espero que la explicación de mi incomprensión no sea de género... están más sexistas que nunca!). Creo que tanto hombres como mujeres tendemos a endurecernos después de vivir historias con final (que son todas), es como una costra que se precia de tal en la medida que resiste la exposición del interior a la intemperie. Sin embargo, ahí está mi estrella: confiar después del temporal. Es más, soy un convencido que la mujer que me espera en la otra esquina se ha equivocado lo suficiente para tenerme dedicado lo que me queda de vida descubriéndole esa médula blanda y totipotencial.
Mi comentario era más personal, decía relación con la decepción de las palabras de clementine, que es naranjita y brilla si uno la mira perfilada hacia la luz del sol.

 
At viernes, abril 07, 2006 12:35:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Me pidieron que no sea rota y haré caso.
Creo que tienes razon cuando dices que todos nos endurecemos, pero creo que en el caso de las mujeres es mas notorio que en los hombres. Elproblema es que muhos de ustedes despues dicen que somos frias, cuando ha sido uno de los suyos el que nos hizo pedazos y luego partio, como si nada, diciendo que fue lindo, pero la mierda, quedo en una.... Hasta el momento no hay nada que me haga pensar de otro modo.

Y sobre que la Clem brilla es solo porque es capaz de volver a hacerlo después de la caída... algo envidiable que por mas que ha tratado de enseñarme, parece que le sali mala alumna.

Saludos, Tama

 
At viernes, abril 07, 2006 3:28:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Eso es porque es matea (perna aunque le duela!!) Jajaja
Marce.

 
At domingo, abril 09, 2006 12:32:00 p. m., Blogger Juan Pablo Belair said...

Tam, definitivamente no me gusta y realmente no me lo creo, eso de ustedes y nosotros. Es muy triste (e indignante también) cuando alguien hace sufrir a otro, pero no creo que eso sea patrimonio masculino. Reconozco que como la historia ha sido escrita por hombres, el registro de aquellos penosos episodios es más abultado a este lado, circunstancia que también debiera ser reconocida por mujeres, sobre todo hoy, que hay señales nítidas de que la historia comienza a cantarse a dos voces. En definitiva, creo que hay que aprender de lo que tú llamas mierda para no seguir echándole la culpa al empedrado, que en tu caso tiene nombre de varón.

 
At martes, abril 11, 2006 12:06:00 p. m., Anonymous Anónimo said...

Ya, sigamos, mira entiendo lo que dices sobre el "nosotras" y ustedes y que hablo desde alguna herida, vieja pero herida. A mi como a muchas mujeres nos asombran todo lo que aguantan las palabras dichas por tantos hombres. Como dijo una amiga brillante, el problema es que quieres creer.
Yo no le echo la culpa al empedrado, lo que digo es que es bueno reconocer que muchos de los de tu genero les han hecho un mal favor a los que como tu dicen entender esto de lo que hablamos. En una de esas las que dicen que es mejor ser medio bruja, tienen razon, que lata, pero parece que asi funciona la cosa.

 
At lunes, abril 17, 2006 11:20:00 p. m., Blogger Juan Pablo Belair said...

Tam, pido autorización a nuestra común lucecita naranja para responderle a continuación, sin antes disculparme por mi demora.
Creo que insiste en algo muy odioso para la convivencia y, más allá, para la necesaria y esperada evolución de nuestras precarias relaciones. Hay un corporativismo en sus dichos que se parece tanto a aquellos que miran el bosque sin distinguir los árboles. ¿No ha pensado que ésa pueda ser una razón para sus infortunadas experiencias?
Estoy de acuerdo que el voluntarismo tiende a la ceguera, pero sin lugar a dudas, la desconfianza a la soledad... y mire que se lo digo yo que de éstas últimas tengo experiencia.
Con (a esta altura) cariño, JP

 
At domingo, abril 30, 2006 4:59:00 a. m., Blogger Solo en la Oscuridad said...

Hace algo de tiempo escribi un post con el titulo Duelo, en el refleja lo que para mi es la desilucion, en ocasiones desfrsadas por frases, por palabras o indiferencia.

Gracias por permitirme refugiarme en estas horas de la madrugada con mi coca-cola diluida por los hiles derretidos, mis cigarros marlboro y el silencio de la sala de negocios del hotel.

Gracias por permitirme estar un momento aqui, se que antes te lo mencione y ahora lo ratifico, me encanta tu blog.

Mis mejores deseos

 

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